El pasado 24 de septiembre, el Centro Cultural y Educativo Español Reyes Católicos fue sede del X Festival de Música Sacra de Bogotá.

En esta ocasión disfrutamos de un concierto para viola a cargo de la intérprete española Isabel Villanueva que nos deleitó con un recital en forma de espejo, comenzando y acabando con obras del Barroco centroeuropeo.

En la primera parte escuchamos el final de las Sonatas del Santísimo Rosario (Passacaglia) de Heinrich Ignaz Biber. La pieza repite hasta 65 veces el tetracordo propuesto al principio, siendo desarrolladas estas repeticiones dejándolas más a la vista o más camufladas según avanza la pieza. La idea del compositor era la de representar al ángel de la guarda que nos acompaña y
vigila todo el tiempo.

Posteriormente, Isabel Villanueva interpretó la obra del compositor húngaro Gyorgy Kurtág, Signos juegos y mensajes que nos llevó a ambientes sonoros y meditativos intercalados con pasajes de gran virtuosismo.

Por último, escuchamos la Partita n°2 de J. S. Bach, originalmente escrita para violín que está conformada por los siguientes movimientos: Allemande, Courante, Sarabande, Giga y Chaconne. Hay muchísima literatura e investigación sobre la obra de Bach, de la que seguimos encontrando múltiples enigmas. Uno de los más curiosos que encontramos aquí es que en el primer compás de la pieza, en su transcripción numérica, encontramos los números 40 y 41, que corresponden al nombre de María Bárbara, su primera esposa. En el segundo compás los números son 158, 58 y 14,

Gustavo Zarzuela López correspondientes a Johann Sebastian Bach. Esto nos da una pista de hasta qué punto su música está llena de profundidad y significado.